Bruselas la Capital Europea, es una ciudad que te sorprenderá, por sus contrastes, por su arquitectura, y por su mestizaje. Es una ciudad bastante accesible, y el centro se puede recorrer fácilmente a pie, también existe la opción de alquilar una bicicleta, o utilizar el metro para movernos por ella. La conexión entre el Aeropuerto y la ciudad también es magnifica, existe un tren que nos acercará a Bruselas en diez minutos y podremos escoger en que estación bajar, de las tres principales, que nos dejarán al norte, centro o sur de la ciudad.
Un consejo importante si visitáis la capital europea es llevar siempre un buen chubasquero, ya que la lluvia será vuestra compañera de ruta por Bruselas.
Por mi experiencia, estuve cuatro días visitando la ciudad en Agosto del 2014, me gustaría recomendaros algunas visitas imprescindibles, según mi opinión, que no debes perderte en esta gran ciudad.
1. La Grand Place
La Grand Place es la plaza más bonita de Europa, tiene un encanto especial, por su arquitectura, su tamaño y sus espectaculares juegos de luces y sonido que deleitan a todos sus visitantes. De hecho fue declarada patrimonio de la Humanidad por la Unesco en 1998. Es una plaza muy coqueta donde se encuentran algunos de los edificios más espectaculares de la ciudad.
Destacan el Hotel de Ville, el edificio del Ayuntamiento el más emblemático y antiguo de la plaza, data de 1459, único edificio de arquitectura medieval , y en el destaca su enorme torre de estilo gótico de 96 metros de altura rematada por la figura del arcángel San Miguel, patrón de Bruselas. Destaca también la a simetría del edificio, la parte izquierda es diferente de la derecha. Cuenta la leyenda que el arquitecto que concibió el edificio se suicidó, lanzándose desde la torre tras percatarse del error....
El segundo edificio que nos sorprenderá es La Casa del Rey, también conocida como la casa del pan, ya que en sus inicios el edificio de madera albergaba la venta de pan. más tarde se convirtió en un edificio de piedra que albergaba las dependencias administrativas del Duque, pasando a denominarse la Casa del Duque, cuando el Duque fue coronado Rey de España, el edificio pasó a llamarse Casa del Rey, Fue entonces cuando la Casa fue reconstruida en estilo neo gótico. Actualmente tras nuevas remodelaciones el edificio alberga el Museo de la Ciudad de Bruselas.
El resto de edificios que rodean la plaza son en su mayoría las antiguas casas gremiales, como la Maison des Ducs de Brabant, conjunto de edificios flamencos formados por seis casas gremiales, o Le Pigeon, edificio de viviendas donde se alojó el escritor Víctor Hugo.
La plaza nació gracias a la confluencia de varios mercados, que propiciaron la construcción de sus magníficos edificios. En 1695 la ciudad fue bombardeada por los franceses y muchos edificios de la Grand Place destruidos, sin embargo fue reconstruida y tras varias modificaciones, el conjunto arquitectónico fue reconstruido y restaurado.
Os recomiendo la visita a esta maravillosa plaza y si además coincide con la celebración del Tapiz de Flores de la Grand Place, mejor todavía, durante la festividad la plaza se llena de flores ensalzando aún más su belleza y singularidad, y miles de visitantes de todo el mundo pasan por Bruselas para visitarla.
2. Atomium de Bruselas
El Atomium es a Bruselas, lo que la Torre Eiffel a París, ambos son símbolos creados para sorprender al mundo durante la celebración de la expo universal, y ambos han permanecido como símbolos de la ciudad, convirtiéndose en los monumentos más visitados. El Atomium fue el pabellón principal de la Exposición universal celebrada en Bruselas en 1958, y no tenía que durar más de seis meses. Representa los nueve átomos del cristal de hierro. Tiene una altura de 102 metros, y esta compuesto por nueve esferas, unidas entre ellas, por tubos de aluminio. El Arquitecto del Atomium, fue André Waterkeyn y en su día recibió duras críticas, el gran edificio no acababa de gustar, como también ocurrió con la Torre Eiffel.
El entorno del Atomium es también interesante, se ubica junto al parque de Laeken, donde se pueden visitar otros pabellones de la expo universal, destacan el Pabellón chino y la Torre Japonesa y el parque MiniEuropa, reproducciones en miniatura de los principales edificios y monumentos europeos, ideal para los peques.
En cuanto a si vale la pena visitar su interior, la mayoría de opiniones son negativas, de hecho yo no lo visité, ya que no había exposiciones muy interesantes en su interior y las vistas de la ciudad no son las mejores, porque se encuentra un tanto alejado del centro de la ciudad. Si bien si recomiendo acercarse al Atomium, porque es realmente imponente y seguro que os sorprenderá.
La mejor manera de llegar es utilizar el metro (linea 6, Heysel) y en unos 20-25 minutos nos encontraremos ante este gran monumento.
3. Palacio Real
El Palacio Real de Bruselas se ubica en la Parte alta de la ciudad, una de las zonas que más me gustaron de Bruselas, (además de la zona de la Grand Place). Merece la pena acceder al Palacio desde el Parque de Bruselas, desde donde aparece la fachada del palacio enmarcada entre los arboles. Fue construido a principios del XIX, por Guillermo I en la actualidad ya no es la residencia de la familia Real belga, sin embargo si que constituye su lugar de trabajo, se siguen celebrando en su interior las principales reuniones del país y las audiencias reales. Si viajáis en verano podrás visitar las estancias del palacio de forma gratuita, lo cual os recomiendo ya que el interior alberga unas estancias magnificas, destacando la sala del trono, los tapices, obras pictóricas y lámparas de araña.
4. Manneken-Pis
Muy cerca de la Grand Place, entre las calles L'Etuve y Chene, encontraremos a este pequeño gran símbolo de la ciudad por todos conocido. Y os preguntaréis que tiene de especial esta pequeña estatua de unas 50 centímetros, que representa un niño desnudito orinando a la pila de la fuente.....pues no se que es pero pasas de la decepción inicial por su tamaño, es tan pequeño....a una extraña simpatía por este entrañable personaje que desde el S. XV, preside
esta fuente de la ciudad.
Además después de escuchar las leyendas que hay en torno a el, todavía es mayor el cariño hacia este personaje. Cuenta una de estas leyendas que durante un ataque a la ciudad, durante el asedio enemigo, cuando estaban a punto de prender una carga explosiva en la muralla, un niño que les estaba espiando salvó a la ciudad orinando sobre la mecha encendida. Otra de las historias cuenta que durante la visita de una familia a la ciudad perdió a su hijo pequeño, que apareció después de un par de días de búsqueda desesperada, tranquilamente haciendo pis.... Otra de las leyendas cuenta que un niño orinó desde las murallas de la ciudad sobre las tropas enemigas. La cuestión es que este entrañable personaje es el símbolo por excelencia de la ciudad y lo encontraremos en todos los escaparates y tiendas de souvenirs de toda Bélgica, en multitud de tamaños y colores. Creo que para los Bruselenses representa su espíritu independiente y luchador.
Como curiosidades comentar que la pequeña estatua fue robada en varias ocasiones, y la actual es una reproducción fiel de la original, que se encuentra en el Musée de la Ville, junto con la enorme colección de trajes del Manneken-Pis, más de 800, que luce en ocasiones especiales, en esta ocasión hacia alusión a la conocida y premiada cerveza bruselense "delirium tremens".
5. Galerías Saint Hubert
Muy cerca de la Grand Place se encuentran estas Galerías, que destacan por ser las primeras galerías comerciales de Europa, datan de 1847, y se convirtieron en punto de encuentro de escritores, artistas e intelectuales. Su diseño fue realizado por el arquitecto Cluyseaner, por encargo del Rey, para proteger a los bruselenses de la lluvia durante sus compras. Miden en total unos doscientos metros de largo y están cubiertas por una fantástica cúpula de cristal, que deja que entre la luz.
Las galerías constan de tres zonas o tres galerías diferentes, la Galería del Rey, de la Reina, y del Príncipe, que sirven para unir diferentes partes de la ciudad, como la Grand Place con la Catedral de Bruselas.
Dentro de las Galerías se encuentran tiendas clásicas especializadas, chocolaterías, sombrererías, tiendas de encajes, guantes etc. También alberga restaurantes con sus terrazas e incluso un teatro.
Cuando entras en las Galerías realizas un viaje en el tiempo, y te imaginas a los bruselenses del s.XIX, con su indumentaria, refugiándose de la lluvia, paseando por las galerías.
6. Catedral de San Miguel y Santa Gúdula
La fachada de la catedral de Bruselas recuerda a la Catedral de Notre Dame de París, de estilo gótico,sobre todo por sus dos torres simétricas de unos 65 metros de altura. Se encuentra en lo alto de una colina, muy cerca de las Galerías Saint Hubert , de la Plaza de España, y de la Estación Central en pleno centro de la capital Belga y su visita es gratuita.
El edificio fue finalizado a mediados del S. XV., realizándose diversas reformas, pasando del estilo románico al gótico actual. En cambio en su interior podemos encontrar diferentes estilos, sobre todo en la decoración, barroco, rococó e incluso vidrieras de estilo renacentista.
La Catedral está dedicada a San Miguel, patrón de Bruselas y a Santa Gúdula, cuyos restos se trasladaron a este templo.
7. Mont des Arts y Place Royal
Detrás del Palacio Real y sobre una colina, conocida también como la zona de los museos se encuentran la Place Royal y el Mont des Arts. Su principal atractivo, además de sus magníficos museos, son las estupendas vistas panorámicas de la ciudad, desde donde se contempla la Torre del Ayuntamiento de la Grand Place.
También encontraremos en esta zona unos maravillosos jardines, así como una gran oferta de comida callejera, por lo que resulta un buen lugar donde descansar y reponer fuerzas. Si eres amante del arte en esta zona encontrarás los Reales museos de bellas artes, el Bozar (museo de arte contemporáneo), el Museo Magritte y un curioso edificio modernista del S. XIX que alberga el Museo de instrumentos musicales, entre otros. El conjunto es magnifico, para mí esta zona es una auténtica joya e imprescindible si visitas la capital Europea. Toda esta zona se habilitó a finales del s.XIX, para la exposición Universal de 1910.
De la Place Royal (Koningsplein) destacar su armonía, ya que está rodeada por edificios de estilo neoclásico. Destaca la Iglesia de Saint Jacques sur Coundenberg, este edificio, durante la Revolución Francesa se utilizo como Templo de la Ley y la Razón, y en el centro de la plaza destaca la estatua equestre de Godofredo de Bouillon.
8. Barrio de Sablon
Conocido como el barrio de los anticuarios, ya que todos los fines de semana se celebra en la Plaza del Grand Sablon, ya de por si encantadora, un gran mercadillo donde podrás encontrar un gran número de antigüedades, objetos y libros de segunda mano. Este distrito es actualmente uno de los barrio más de moda hoy en Bruselas y esta repleto de jardines, preciosas tiendas, galerías de arte moderno, restaurantes, cafeterías y terrazas. Visita imprescindible es la magnifica Iglesia gótica de Notre Dame du Sablon, destacando su precioso exterior y sus 11 vidrieras de 15 metros que iluminan el interior de la iglesia más bonita de Bruselas.
otro de los rincones que no debes perderte en la visita a este coqueto barrio es el Petit Sablón, un pequeño parque o más bien jardín, que data de 1890, protegido por una verja de Hierro forjado donde están representadas 48 estatuillas con los diferentes gremios bruselenses. En el interior del jardín encontraremos dos estatuas presidiendo el parque sobre una fuente, representando a dos héroes nacionales. Además es un espacio muy cuidado con unas flores preciosas y en el que relajarse porque evoca paz y tranquilidad.
9. Palacio del cincuentenario
Imponente monumento, construido para albergar la ExposiciónMundial de 1880, y posteriormente recibió esa denominación con motivo de la conmemoración del cincuentenario de Bélgica como nación independiente. De arquitectura imponente que nos recuerda a la puerta de Brandeburgo (tenemos pendiente una visita a Berlín), alberga en su interior diversos museos y exposiciones bastante interesantes, el Museo de historia Militar, un museo dedicado al automóvil (Autoword Brussels) y el Museo del Cincuentenario. Además se puede acceder gratuitamente al mirador en uno de sus laterales para obtener buenas vistas de la ciudad.
Además el extenso parque, que lleva el mismo nombre es una buena zona para descansar y relajarse después de visitar la zona europea o barrio europeo cercano a este extraordinario monumento.
10. Barrio Europeo
Aunque mi visita fue en Agosto donde la actividad del parlamento Europeo es prácticamente nula, si que considero interesante dar un paseo por la zona y poder ver in situ los edificios que tantas veces aparecen en las noticias y donde se toman las principales decisiones políticas que afectan a nuestros países. Es un barrio muy tranquilo en agosto, con edificios emblemàticos, como el Parlamento Europeo, el Edificio Berlaymont, que alberga la Comisión Europea, y el edificio Europa, donde se celebran las cumbres europeas, tan mediáticas como poco efectivas....
Existe la posibilidad de visitar el interior de los edificios y de realizar alguna visita guiada, nosotros simplemente paseamos por el barrio. Si que os recomiendo si estáis por el barrio hacer una visita gastronòmica a
la Maison Antoine, uno de los establecimientos de patatas fritas (y otras especialidades más antiguas de Bruselas), eso si hay que ir con mucha paciencia, puedes estar en la cola durante una media hora. Te recomiendo una vez que tengas las patatas sentarte en una de las terrazas que hay alrededor y pedir las bebidas para acompañar las sabrosas patatas fritas. La verdad es que valió la pena la espera...Bon appetit
Un consejo importante si visitáis la capital europea es llevar siempre un buen chubasquero, ya que la lluvia será vuestra compañera de ruta por Bruselas.
Por mi experiencia, estuve cuatro días visitando la ciudad en Agosto del 2014, me gustaría recomendaros algunas visitas imprescindibles, según mi opinión, que no debes perderte en esta gran ciudad.
1. La Grand Place
La Grand Place es la plaza más bonita de Europa, tiene un encanto especial, por su arquitectura, su tamaño y sus espectaculares juegos de luces y sonido que deleitan a todos sus visitantes. De hecho fue declarada patrimonio de la Humanidad por la Unesco en 1998. Es una plaza muy coqueta donde se encuentran algunos de los edificios más espectaculares de la ciudad.
Destacan el Hotel de Ville, el edificio del Ayuntamiento el más emblemático y antiguo de la plaza, data de 1459, único edificio de arquitectura medieval , y en el destaca su enorme torre de estilo gótico de 96 metros de altura rematada por la figura del arcángel San Miguel, patrón de Bruselas. Destaca también la a simetría del edificio, la parte izquierda es diferente de la derecha. Cuenta la leyenda que el arquitecto que concibió el edificio se suicidó, lanzándose desde la torre tras percatarse del error....
El segundo edificio que nos sorprenderá es La Casa del Rey, también conocida como la casa del pan, ya que en sus inicios el edificio de madera albergaba la venta de pan. más tarde se convirtió en un edificio de piedra que albergaba las dependencias administrativas del Duque, pasando a denominarse la Casa del Duque, cuando el Duque fue coronado Rey de España, el edificio pasó a llamarse Casa del Rey, Fue entonces cuando la Casa fue reconstruida en estilo neo gótico. Actualmente tras nuevas remodelaciones el edificio alberga el Museo de la Ciudad de Bruselas.El resto de edificios que rodean la plaza son en su mayoría las antiguas casas gremiales, como la Maison des Ducs de Brabant, conjunto de edificios flamencos formados por seis casas gremiales, o Le Pigeon, edificio de viviendas donde se alojó el escritor Víctor Hugo.
La plaza nació gracias a la confluencia de varios mercados, que propiciaron la construcción de sus magníficos edificios. En 1695 la ciudad fue bombardeada por los franceses y muchos edificios de la Grand Place destruidos, sin embargo fue reconstruida y tras varias modificaciones, el conjunto arquitectónico fue reconstruido y restaurado.
Os recomiendo la visita a esta maravillosa plaza y si además coincide con la celebración del Tapiz de Flores de la Grand Place, mejor todavía, durante la festividad la plaza se llena de flores ensalzando aún más su belleza y singularidad, y miles de visitantes de todo el mundo pasan por Bruselas para visitarla.
2. Atomium de Bruselas
El Atomium es a Bruselas, lo que la Torre Eiffel a París, ambos son símbolos creados para sorprender al mundo durante la celebración de la expo universal, y ambos han permanecido como símbolos de la ciudad, convirtiéndose en los monumentos más visitados. El Atomium fue el pabellón principal de la Exposición universal celebrada en Bruselas en 1958, y no tenía que durar más de seis meses. Representa los nueve átomos del cristal de hierro. Tiene una altura de 102 metros, y esta compuesto por nueve esferas, unidas entre ellas, por tubos de aluminio. El Arquitecto del Atomium, fue André Waterkeyn y en su día recibió duras críticas, el gran edificio no acababa de gustar, como también ocurrió con la Torre Eiffel.
El entorno del Atomium es también interesante, se ubica junto al parque de Laeken, donde se pueden visitar otros pabellones de la expo universal, destacan el Pabellón chino y la Torre Japonesa y el parque MiniEuropa, reproducciones en miniatura de los principales edificios y monumentos europeos, ideal para los peques.
En cuanto a si vale la pena visitar su interior, la mayoría de opiniones son negativas, de hecho yo no lo visité, ya que no había exposiciones muy interesantes en su interior y las vistas de la ciudad no son las mejores, porque se encuentra un tanto alejado del centro de la ciudad. Si bien si recomiendo acercarse al Atomium, porque es realmente imponente y seguro que os sorprenderá.
La mejor manera de llegar es utilizar el metro (linea 6, Heysel) y en unos 20-25 minutos nos encontraremos ante este gran monumento.
3. Palacio Real
El Palacio Real de Bruselas se ubica en la Parte alta de la ciudad, una de las zonas que más me gustaron de Bruselas, (además de la zona de la Grand Place). Merece la pena acceder al Palacio desde el Parque de Bruselas, desde donde aparece la fachada del palacio enmarcada entre los arboles. Fue construido a principios del XIX, por Guillermo I en la actualidad ya no es la residencia de la familia Real belga, sin embargo si que constituye su lugar de trabajo, se siguen celebrando en su interior las principales reuniones del país y las audiencias reales. Si viajáis en verano podrás visitar las estancias del palacio de forma gratuita, lo cual os recomiendo ya que el interior alberga unas estancias magnificas, destacando la sala del trono, los tapices, obras pictóricas y lámparas de araña.4. Manneken-Pis
esta fuente de la ciudad.
Además después de escuchar las leyendas que hay en torno a el, todavía es mayor el cariño hacia este personaje. Cuenta una de estas leyendas que durante un ataque a la ciudad, durante el asedio enemigo, cuando estaban a punto de prender una carga explosiva en la muralla, un niño que les estaba espiando salvó a la ciudad orinando sobre la mecha encendida. Otra de las historias cuenta que durante la visita de una familia a la ciudad perdió a su hijo pequeño, que apareció después de un par de días de búsqueda desesperada, tranquilamente haciendo pis.... Otra de las leyendas cuenta que un niño orinó desde las murallas de la ciudad sobre las tropas enemigas. La cuestión es que este entrañable personaje es el símbolo por excelencia de la ciudad y lo encontraremos en todos los escaparates y tiendas de souvenirs de toda Bélgica, en multitud de tamaños y colores. Creo que para los Bruselenses representa su espíritu independiente y luchador.Como curiosidades comentar que la pequeña estatua fue robada en varias ocasiones, y la actual es una reproducción fiel de la original, que se encuentra en el Musée de la Ville, junto con la enorme colección de trajes del Manneken-Pis, más de 800, que luce en ocasiones especiales, en esta ocasión hacia alusión a la conocida y premiada cerveza bruselense "delirium tremens".
5. Galerías Saint Hubert
Muy cerca de la Grand Place se encuentran estas Galerías, que destacan por ser las primeras galerías comerciales de Europa, datan de 1847, y se convirtieron en punto de encuentro de escritores, artistas e intelectuales. Su diseño fue realizado por el arquitecto Cluyseaner, por encargo del Rey, para proteger a los bruselenses de la lluvia durante sus compras. Miden en total unos doscientos metros de largo y están cubiertas por una fantástica cúpula de cristal, que deja que entre la luz.Las galerías constan de tres zonas o tres galerías diferentes, la Galería del Rey, de la Reina, y del Príncipe, que sirven para unir diferentes partes de la ciudad, como la Grand Place con la Catedral de Bruselas.
Dentro de las Galerías se encuentran tiendas clásicas especializadas, chocolaterías, sombrererías, tiendas de encajes, guantes etc. También alberga restaurantes con sus terrazas e incluso un teatro.
Cuando entras en las Galerías realizas un viaje en el tiempo, y te imaginas a los bruselenses del s.XIX, con su indumentaria, refugiándose de la lluvia, paseando por las galerías.
6. Catedral de San Miguel y Santa Gúdula
La fachada de la catedral de Bruselas recuerda a la Catedral de Notre Dame de París, de estilo gótico,sobre todo por sus dos torres simétricas de unos 65 metros de altura. Se encuentra en lo alto de una colina, muy cerca de las Galerías Saint Hubert , de la Plaza de España, y de la Estación Central en pleno centro de la capital Belga y su visita es gratuita. El edificio fue finalizado a mediados del S. XV., realizándose diversas reformas, pasando del estilo románico al gótico actual. En cambio en su interior podemos encontrar diferentes estilos, sobre todo en la decoración, barroco, rococó e incluso vidrieras de estilo renacentista.
La Catedral está dedicada a San Miguel, patrón de Bruselas y a Santa Gúdula, cuyos restos se trasladaron a este templo.
7. Mont des Arts y Place Royal
Detrás del Palacio Real y sobre una colina, conocida también como la zona de los museos se encuentran la Place Royal y el Mont des Arts. Su principal atractivo, además de sus magníficos museos, son las estupendas vistas panorámicas de la ciudad, desde donde se contempla la Torre del Ayuntamiento de la Grand Place.
También encontraremos en esta zona unos maravillosos jardines, así como una gran oferta de comida callejera, por lo que resulta un buen lugar donde descansar y reponer fuerzas. Si eres amante del arte en esta zona encontrarás los Reales museos de bellas artes, el Bozar (museo de arte contemporáneo), el Museo Magritte y un curioso edificio modernista del S. XIX que alberga el Museo de instrumentos musicales, entre otros. El conjunto es magnifico, para mí esta zona es una auténtica joya e imprescindible si visitas la capital Europea. Toda esta zona se habilitó a finales del s.XIX, para la exposición Universal de 1910.
8. Barrio de Sablon
otro de los rincones que no debes perderte en la visita a este coqueto barrio es el Petit Sablón, un pequeño parque o más bien jardín, que data de 1890, protegido por una verja de Hierro forjado donde están representadas 48 estatuillas con los diferentes gremios bruselenses. En el interior del jardín encontraremos dos estatuas presidiendo el parque sobre una fuente, representando a dos héroes nacionales. Además es un espacio muy cuidado con unas flores preciosas y en el que relajarse porque evoca paz y tranquilidad.9. Palacio del cincuentenario
Además el extenso parque, que lleva el mismo nombre es una buena zona para descansar y relajarse después de visitar la zona europea o barrio europeo cercano a este extraordinario monumento.
10. Barrio Europeo
Aunque mi visita fue en Agosto donde la actividad del parlamento Europeo es prácticamente nula, si que considero interesante dar un paseo por la zona y poder ver in situ los edificios que tantas veces aparecen en las noticias y donde se toman las principales decisiones políticas que afectan a nuestros países. Es un barrio muy tranquilo en agosto, con edificios emblemàticos, como el Parlamento Europeo, el Edificio Berlaymont, que alberga la Comisión Europea, y el edificio Europa, donde se celebran las cumbres europeas, tan mediáticas como poco efectivas....Existe la posibilidad de visitar el interior de los edificios y de realizar alguna visita guiada, nosotros simplemente paseamos por el barrio. Si que os recomiendo si estáis por el barrio hacer una visita gastronòmica a
la Maison Antoine, uno de los establecimientos de patatas fritas (y otras especialidades más antiguas de Bruselas), eso si hay que ir con mucha paciencia, puedes estar en la cola durante una media hora. Te recomiendo una vez que tengas las patatas sentarte en una de las terrazas que hay alrededor y pedir las bebidas para acompañar las sabrosas patatas fritas. La verdad es que valió la pena la espera...Bon appetit
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